dolida.dolorida
se que ha pasado un mes (más de un mes más bien) desde el
segundo y último post. han pasado muchas cosas desde entonces, como es habitual
en la vida de cualquier persona. y en este proceso de cambio en el que me veo
inmersa, cada día parece una semana, cada semana parece un mes. intento echar
la vista atrás y no logro recordar con exactitud qué estaba haciendo y si lo
recuerdo, parece que fue hace una eternidad.
tampoco es algo que sea realmente importante, ya que desde
hace tiempo me he propuesto vivir únicamente en el ‘ahora.’ quizá permitirme pensar
un poco a medio plazo. me niego a vivir pensando en 6 meses vista sin saber qué
día es hoy ni dónde estoy o poder tener tiempo para dedicarme ese ritual
nocturno que me da la vida y me ayuda a recuperarme y asimilar. me niego a
vivir como hasta hace bien poco. siempre preparábamos proyectos, preciosos por
cierto, que ocurrían a 6 meses vista. y cuando llegaban los 6 meses en los que
habías estado trabajando duro y sin levantar cabeza, disfrutar ni un solo día
ni tener vida social o emocional, apenas podías disfrutarlo o saborearlo (ese
trabajo realizado) porque ese día ya estabas preparando el siguiente que
ocurriría a los siguientes 3, 6 meses o un año.
y es cierto que aunque ahora continúo realizando trabajos de
cara a futuro, dentro de la misma profesión, estoy viviendo mucho más el
presente. saboreando el momento. incluso durante los momentos de dolor. en esos
casi es en los que más importa todo.
intento focalizar mi
atención en lo que ocurre ahora, y dejar de pensar en cosas (sobre todo
relacionadas con el dolor) como: esto va a ser siempre así, menuda mierda, por
qué a mi? , por qué apareces en el peor momento, no puedo más, etc… ya comenté
hace un mes que la batalla la iba ganando, y creo que una de las razones
principales de este éxito parcial es precisamente eso, centrarme en lo que
ocurre ahora, intentar mejorarlo o solucionarlo y si no tiene solución,
asimilarlo y lograr vivir dentro del máximo confort, tranquilidad, calma y
calidad la situación o problema existente. porque hay que seguir viviendo a
pesar de lo que ocurre, hay que seguir.
y si solo pienso en ahora, no siento angustia por mañana e incluso me
siento mejor cuando dejo de preocuparme por todo o todos todo el rato.
hace un rato, me encontraba charlando con un socio medicinal
en lasanta. hablábamos y compartíamos palabras y emociones. realmente, y tras
vivir a diario este tipo de conversaciones (sobre todo el último año) he de
decir que realmente si creo que entre los enfermos crónicos hay una conexión y
un lenguaje especial. cada día me ratifico. incluso cuando se suma alguna
persona a la conversación ya existente entre dos enfermos, y aún sabiendo esta
tercera persona lo que nos ocurre a cada uno, resulta difícil explicarle cómo
la gente desaparece de tu vida cuando hay un dolor o una enfermedad. resulta
difícil explicarle cómo cuando conoces a una persona que te gusta dudas si
decirle de primeras lo que te ocurre. hemos llegado a la conclusión de que
mejor desde el principio, porque si empiezas a sentir cosas, la posible
negativa a los quince días duele más aun. resulta difícil que la gente entienda
que has llegado a hablar con tu familia, pareja y amigos más íntimos y les has
dicho: el día que yo decida que ya está bien, que no quiero vivir más así,
necesito que respetéis mi opinión. resulta difícil que alguien entienda lo mal
que sienta dar pena. y en este punto mi aportación, ahora mismo, es que hemos
de dejar el ego de lado, y dejarnos ayudar. que hay gente que realmente si
quiere ayudar. y que una cosa es la pena y otra el cariño. nadie queremos dar
pena ni mucho menos, pero igual que nosotros ayudamos de corazón, hemos de
aprender a recibir esa ayuda. es un gran ejercicio vital, reconocer que
necesitas ayuda y dejarte ayudar, de humildad básicamente. lo estoy haciendo desde hace muy poco, y TODO
lo que he recibido, ha sido positivo. he abierto mi corazón, y todo lo que ha
venido han sido cosas buenas, y mi relación con toda la gente a su vez mejora,
y yo mejoro. algo tan simple y complicado como esto produce una mejoría. esto
es así.
pero, por supuesto, no es nada fácil.
a todos nos gusta mucho ayudar, pero no ser ayudados. ego y
el orgullo nos impiden abrirnos a recibir ayuda. no ayuda material, por
supuesto. y cuando hablo de recibir ayuda, hablo de cosas serias. no de la
ayuda de boquilla y para la foto que ofrece la gente en el momento que se espera
que lo diga y luego no acude. la gente que más ayuda necesita, es la que
menos la pide y más le cuesta sacar las palabras y fuerza para pedirla y
recibirla; y la que, por lo general, menos se queja.
resulta difícil explicar y confesar a bocajarro que la gente
que desaparece de tu vida, que no comprende, que se cansa, que no se preocupa
en leer acerca de lo que le ocurre ese amigo,
y empatiza. eso lleva mucho trabajo y no todo el mundo está dispuesto. y
aunque al tercero en cuestión le parezca algo inhumano ese comportamiento que estamos contando, nos mira incrédulo... resulta que existe.todo esto para nosotros son conversaciones de cosas cotidianas. a ese nexo me quiero referir, a que no suena nada marciano o insano mentalmente.
y hoy, me he dado cuenta que todo esto para mi es algo que
ha dolido mucho, y que por fin, ya ha pasado (casi del todo). siempre queda
algo, pero es algo que ya no ocupa parte de mi tiempo. lo que digan los demás,
su comportamiento contigo. he de confesar, y por eso hablo de abrir corazones,
que desde que he comenzado a compartir mis pensamientos y mi vida, noto con
creces el cariño de la gente que me rodea cada día. y me dejo ayudar. y
disfruto sus sonrisas y abrazos. y estoy recibiendo mails preciosos, otros
angustiantes como mis experiencias pasadas. me siento llena de vida.
estamos haciendo un gran trabajo desde la asociación con los
enfermos, y tras sopesar muchos días una labor como la terapeútica en la que
estoy inmersa y el trabajo habitual, he de decir que me siento plena sumando
las dos cosas. por trabajar en mi pasión, que es la música; y por otro lado,
porque estoy dedicando horas, y mucho esfuerzo a leer, estudiar, hablar con
enfermos, buscar soluciones, y está siendo todo precioso. me llena más que
salir de borrachera con mis amigos. lo siento como otro nivel de satisfacción,
un hueco indescriptible que llena en mi vida. y nos queda tanto trabajo aún por
hacer….
venía en el coche, muy dolorida. deseando llegar a casa. he cancelado todos los planes para hoy. el cuerpo me pide meterme en la cama y ahora mismo, escribir todo
esto. y ahora me siento un poco mejor. bien.
dolida y dolorida
No hay comentarios:
Publicar un comentario